Todo Sobre el Ahorro

¿Qué es el ahorro y por qué es tan difícil hacerlo?

Ahorrar es la acción de reservar parte de los ingresos actuales para asegurar el futuro. Implica, por tanto, priorizar este ‘yo futuro’ sobre el ‘yo presente’, un ejercicio que no resulta sencillo para nuestro cerebro. En la era del consumismo, nos encontramos expuestos a constantes estímulos que nos invitan y a hasta nos apuran a gastar nuestro dinero lo más pronto posible.

Un ejemplo de esto son las constantes ventas de descuento que suceden a lo largo del año, recuerdo que cuando era pequeña había dos momentos para las rebajas, el cambio de temporada de verano a otoño, y las clásicas rebajas de invierno en preparación de la entrada de la primavera.

Sin embargo; con el paso del tiempo, la sociedad consumista en la que vivimos nos ha llevado a una sobre estimulación; ya no solamente son estas épocas del año cuando nos ofrecen rebajas y descuentos, también está el Hot Sale, el Buen Fin, el Black Friday, el Ciber Monday, los Prime Days, o incluso plataformas como Shein y Temu que invitan a hacer uso de sus cupones de descuento que tienen todo el año.

Este constante bombardeo de publicidad, junto con el apuro que implica cambiar de una festividad a la otra, genera ansiedad constante que te puede llevar a gastar demás o peor aún endeudarte, lo cual vuelve todo un desafío el poder generar un ahorro.

¿Por qué es importante ahorrar?

Ahorrar tiene una infinidad de beneficios, pero aquí te voy a compartir los que a mi parecer son los más importantes:

  1. Estar preparado para el futuro: realmente no sabemos qué es lo que pueda suceder el día de mañana, tener un ahorro juega un importante papel en nuestra tranquilidad y capacidad de afrontamiento de problemas. Tener la seguridad de que puedes afrontar lo que venga te permitirá dormir más tranquila y sentirte más seguro; ya sea atender una emergencia médica, pagar un imprevisto o tener un retiro digo. El dinero no compra la felicidad, pero calma los nervios.
  2. Alcanzar metas: hoy en día tenemos que asumir que el dinero es un factor determinante para alcanzar metas de todo tipo, hacer crecer tu patrimonio, prepararte profesionalmente o incluso otorgarle una vida más digna a tu familia. Tener en mente todo aquello que queremos alcanzar nos permitirá está tarea de priorizar lo más importante sobre aquello pasajero o poco relevante.

¿Cómo empezar a ahorrar?

Ahorrar es un hábito tan importante que, independientemente de cuánto ganes, tienes que empezar a hacerlo, aprender a ahorrar va a requerir que te sumerjas a profundidad en el mar de tus finanzas personales, te voy a presentar 4 opciones diferentes para ahorrar:

Opción 1: Si ahorrar es algo que nunca en tu vida has hecho existen varias recomendaciones generales por donde puedes empezar. La primera y más famosa de todas es ahorrar el 10% de tu ingreso cada vez que te paguen, ya sea de manera semanal, quincenal o mensual, automáticamente puedes apartar el 10% y destinarlo para tu ahorro.

Opción 2: Otra regla bastante popular es la del 50-30-20, la cual simplemente indica que de tu ingreso total el 50% debe destinarse a cubrir las necesidades básicas, 30% se destina a gustos o caprichos y el último 20% se destinará al ahorro.

Por ejemplo, si tu ganas $1000 pesos a la semana, con esta regla destinarías $500 a tus gastos de necesidades básicas, $300 a tus gastos de gustos/caprichos o entretenimiento y $200 a tu cuenta de ahorro. Ahora bien, estas dos reglas están bien para empezar; sin embargo, conforme más vayas avanzando en el control de tus finanzas personales, va a ser necesario que también ahorres de una manera más adecuada a tus necesidades específicas.

Opción 3: Definir tu capacidad de ahorro específica para tus necesidades empieza por hacer un presupuesto, puedes utilizar el método que quieras ya que existen muchos, pero no voy a hablar más sobre el presupuesto en este momento porque no es el tema por el que estamos aquí.

Lo siguiente no aplica para todos, pero si para muchas personas, si te encuentras en una situación de sobreendeudamiento, antes de destinar un porcentaje al ahorro, tienes que pagar tus deudas. Pero ojo, esto sólo aplica en el caso de que tus deudas sean tan grandes que disminuyan tu calidad de vida, porque en este caso no tiene sentido ahorrar dinero que podrías utilizar para disminuir tu situación de endudamiento.

Ésta última recomendación puede ser de mucha utilidad en caso de que simplemente estes construyendo el hábito de ahorrar o estés juntando, por ejemplo, tu fondo de emergencias pero ¿qué pasa cuando quieres ahorrar para una meta más específica?

Opción 4: Pregúntate ¿cuánto cuesta aquello que quieres comprar y en cuánto tiempo quieres comprarlo?

En mi proceso de generar un ahorro me gusta siempre recordar lo siguiente “todo se puede, pero no al mismo tiempo”, sé que si me lo propongo puedo renovar mi guardarropa, comprar una casa o irme de viaje a las Bahamas… pero no al mismo tiempo, por eso es bien importante que definas lo siguiente:

¿Cuánto cuesta lo que quieres comprar y en cuánto tiempo lo quieres comprar? Tener la respuesta a estas dos preguntas te va a permitir trazar un plan de ahorro mucho más detallado que te permita tener a tiempo la cantidad de dinero que necesitas para comprar aquello que deseas.

Vamos a suponer que lo que tú quieres es irte de vacaciones a Cancún, realizaste una cotización y te dijeron que un viaje todo pagado (transporte, hospedaje y comidas) te sale en $24,000 para este punto ya realizaste tu presupuesto y pagaste todas tus deudas, así que decides que te darás dos años para juntar ese dinero y tomar las vacaciones de tus sueños. Con las preguntas anteriores ya respondidas, y con tu presupuesto y pago de deudas terminado, determinas que durante los siguientes dos años tienes que ahorrar $1,000 pesos al mes para poder tener el dinero que necesitas a tiempo.

Como podrás darte cuenta, esta última opción que te presento es la más compleja pero también la más completa de todas, requiere que ya hayas desarrollado una serie de habilidades previas; sin embargo, es también la opción que te va a permitir alcanzar tus metas de manera más eficaz y satisfactoria.

Pero en realidad no hay una regla universal sobre qué es mejor para ahorrar, ya que, como lo he mencionado anteriormente, todo lo referente a las finanzas personales es un traje hecho a la medida, por eso se llaman finanzas personales y no finanzas comunitarias o algo por el estilo. De aquí la importancia de sobreponerse a lo abrumador de revisar tu situación financiera, afrontar eso que te hace decir “esque no puedo, esque no sé cómo hacerlo, esque no tengo tiempo”, la única persona responsable de hacer este ejercicio eres tú.

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